El objetivo es sencillo, poner en valor el destino turístico entre todos. El empresario, al promocionar su producto, promociona al mismo tiempo el destino en su conjunto. Esto se hace ofreciendo una imagen cuidada y atractiva que el cliente final asocia con la calidad y profesionalidad del producto.
Debemos ser conscientes que un destino con, por ejemplo, 200 empresarios tiene una enorme capacidad de transmitir y popularizar un mensaje, un producto o una idea. Este tipo de campañas son un potente complemento para plataformas de comercialización y para centrales de reservas.